Spot realizado por alumnos de nuestra facultad obtiene premio nacional de publicidad.
Alex es un buen hombre que se gana la vida disfrazado de león. Los chicos lo zarandean, montan sobre él, tiran sin misericordia de su melena, lo “apanan”, y como si fuera poco, baila incansablemente para ellos. Una mañana su esposa lo despierta para que vaya a trabajar, pero Alex se rehúsa mientras en su cabeza, como una pesadilla, reviven las imágenes del acecho endemoniado de sus menudos clientes. Le duele hasta el último músculo, no da más, pero de repente, maravilla farmacéutica, un analgésico que le proporciona su esposa lo devuelve a la rutina. Fin.
Esta es la historia con que Carlos Zambrano, alumno del quinto ciclo de la facultad de Ciencias de la Comunicación en UPN Cajamarca, secundado por otros cinco compañeros del mismo nivel, obtuvieron recientemente del primer premio en un concurso nacional convocado por Laboratorios Bagó con el propósito de elegir un concepto de campaña para su analgésico Flogodisten.
“Todo surgió en la clase de Creatividad Publicitaria, cuando el profesor Alfieri Díaz mencionó que el concurso estaba abierto y nos retó a participar en él”, recuerda Lucio Burga, quien fue parte del equipo de edición y asumió en el spot el sufrido rol de Alex.
Por su parte, Kimberly Jaeger y Milagros Correa anotan que como en todo proyecto audiovisual hubo que trabajar contra el tiempo. Ellas se hicieron cargo de la producción y tuvieron que elegir una locación, dejar a punto la iluminación e ir en pos del disfraz y otros elementos de utilería. Karla Marchena, esposa de Alex en la historia, y Carlos Izquierdo, chico de ideas agudas, completaron el equipo.
El video estuvo listo tras una larga jornada de edición, fue presentado como trabajo final de curso, y luego colgado en el blog de la facultad tras quedar inscrito en el concurso. Transcurrido un mes, la llamada llegó. “Alex no quiere ir a trabajar”, título con que fue registrado el spot, era uno de los 30 finalistas a nivel nacional y dos de los miembros del grupo fueron invitados a la ceremonia de reconocimiento en la Universidad de Lima unos días atrás.
“Tenía fe en el spot, sabía que podía quedar entre los finalistas, pero claro, nunca imaginé que alcanzaríamos el primer lugar”, dice Carlos Zambrano, creativo y autor del guión original. Y añade que tanto como él quedaron sorprendidos los organizadores del certamen, pues la mayor parte de concursantes de Lima y otras ciudades del país eran alumnos a punto de salir de la universidad.
Como es de suponer, motivados con la obtención de este importante premio, los muchachos aseguran que nada los detiene hasta hacerse de un Cannes. ¿Quién dice que no?
Alex es un buen hombre que se gana la vida disfrazado de león. Los chicos lo zarandean, montan sobre él, tiran sin misericordia de su melena, lo “apanan”, y como si fuera poco, baila incansablemente para ellos. Una mañana su esposa lo despierta para que vaya a trabajar, pero Alex se rehúsa mientras en su cabeza, como una pesadilla, reviven las imágenes del acecho endemoniado de sus menudos clientes. Le duele hasta el último músculo, no da más, pero de repente, maravilla farmacéutica, un analgésico que le proporciona su esposa lo devuelve a la rutina. Fin.
Esta es la historia con que Carlos Zambrano, alumno del quinto ciclo de la facultad de Ciencias de la Comunicación en UPN Cajamarca, secundado por otros cinco compañeros del mismo nivel, obtuvieron recientemente del primer premio en un concurso nacional convocado por Laboratorios Bagó con el propósito de elegir un concepto de campaña para su analgésico Flogodisten.
“Todo surgió en la clase de Creatividad Publicitaria, cuando el profesor Alfieri Díaz mencionó que el concurso estaba abierto y nos retó a participar en él”, recuerda Lucio Burga, quien fue parte del equipo de edición y asumió en el spot el sufrido rol de Alex.
Por su parte, Kimberly Jaeger y Milagros Correa anotan que como en todo proyecto audiovisual hubo que trabajar contra el tiempo. Ellas se hicieron cargo de la producción y tuvieron que elegir una locación, dejar a punto la iluminación e ir en pos del disfraz y otros elementos de utilería. Karla Marchena, esposa de Alex en la historia, y Carlos Izquierdo, chico de ideas agudas, completaron el equipo.
El video estuvo listo tras una larga jornada de edición, fue presentado como trabajo final de curso, y luego colgado en el blog de la facultad tras quedar inscrito en el concurso. Transcurrido un mes, la llamada llegó. “Alex no quiere ir a trabajar”, título con que fue registrado el spot, era uno de los 30 finalistas a nivel nacional y dos de los miembros del grupo fueron invitados a la ceremonia de reconocimiento en la Universidad de Lima unos días atrás.
“Tenía fe en el spot, sabía que podía quedar entre los finalistas, pero claro, nunca imaginé que alcanzaríamos el primer lugar”, dice Carlos Zambrano, creativo y autor del guión original. Y añade que tanto como él quedaron sorprendidos los organizadores del certamen, pues la mayor parte de concursantes de Lima y otras ciudades del país eran alumnos a punto de salir de la universidad.
Como es de suponer, motivados con la obtención de este importante premio, los muchachos aseguran que nada los detiene hasta hacerse de un Cannes. ¿Quién dice que no?